Fin de semana en Andorra como los de antes, digo como los de antes porque todo a cambiado muchísimo y en algunos puntos en mi opinión a peor, pero bueno, mi punto de vista es indiferente, lo importante es la visita a este mágico país que es Andorra la Vella.
Nos alojamos en el Hotel Roc Blanc, como siempre la relación calidad precio, excelente, para cenar optamos por un restaurante dedicado a los quesos, Cheese'Art, una Raclatte acompañada de un buen vino, insuperable, aparte te hacen sentir como en casa, buena musica, con una atencion muy cercana pero muy profesional, al día siguiente por la mañana temprano desayunamos en Art i Pa, pastisseria i forn de pa, buen precio y el desayuno perfecto.
Llega la hora de ir a buscar a nuestro incansable amigo y emprender ruta hacia La Rabassa, el día es perfecto, soleado y con una temperatura agradable, a medida que vamos subiendo aun encontramos restos de nieve en las partes hombrías, las vistas espectaculares.
(Abro paréntesis para hacer un inciso en lo que representaba antes y lo que representa ahora subir por la Carretera de La Rabassa, desde mi punto de vista el recorrido hasta llegar arriba a perdido todo su encanto...., antes a unos cientos de metros donde dejabas atrás Sant Julia de Loria, se terminaba el asfalto y entrabas en una pista forestal magnifica (allí empezaba la excursión de verdad y si era época invernal la emoción estaba garantizada)
hasta arriba del Refugio de La Rabassa, en cambio ahora es una pista asfaltada sin mas, cuando llegabas arriba encontrabas el refugio, al lado, mas adelante había un pequeño descampado, incluido un camión quitanieves antiguo con tracción total, seguramente había vivido mejores momentos, pero su presencia imponía respeto solo verlo, podías tomar algo o comer, dormir todavía no, al menos en aquella época. Ahora llegas y antes de subir ya encuentras todo tipo de aparcamientos...., cuando llegas al Refugio lo primero que ves justo delante de él son vallas.En la época de la que estoy hablando todo era muy familiar, los que lo habéis vivido, sabéis perfectamente a lo que me refiero.
Subías y una de las rutas mas bonitas es la del Pic Negre, indispensable vehículo Todo Terreno te perdías toda la mañana por las cumbres y de vez en cuando te cruzabas con alguien mas, incluido un servicio de excusiones Andorrano, Autocars Nadal, minibus,4x4, autentico, después comías en el Refugio y allí nos juntábamos todos, montañeros, esquiadores, motos, motos de nieve, todo terreno, muy buenos recuerdos de La Rabassa, de la de antes, evidentemente).
Esta vez como al Pic Negre hemos ido bastantes veces decidimos hacer una excusión a pie aprovechando el magnifico día que nos acompañaba, una vez quemadas las calorías necesarias, regresamos para comer, pero el refugio estaba cerrado...., las cosas cambian...
Por la tarde después de un largo paseo por el casco antiguo, Avda. Meritxell y Avda Carlemany, estas dos avenidas en la zona peatonal han ganado un plus muy alto de calidad para los viandantes, han dejado esta zona muy acondicionada y con edificios restaurados o de nueva construcción que hace del paseo una actividad relajante, avenida ancha, escaparates con sus decoraciones de temporada, etc,etc,etc, pero el tiempo pasa y llega la hora de la cena, no tuvimos que desplazarnos mucho del Roc Blanc, justo al lado hay un pequeño restaurante, Marquet Gourmeterie, no hace falta comentar nada, siempre que vamos a Andorra es una visita gastronómica obligada.
Un detalle a tener en cuenta si te alojas en el centro es el parking, tienes que aparcar si o si en parking de pago, ya sea del hotel o externo.
Y aquí termina un corto pero intenso fin de semana en Andorra, por supuesto no todo son restaurantes y excusiones, culturalmente Andorra ofrece mucha oferta relacionada con el arte y la historia que probablemente en un fin de semana no sea suficiente para conocerla.